Miercoles dulce

Este miercoles me ha dado por cocinar. Para no desaprovechar el calor del horno, he hecho dos tartas de un tiron. La primera es una tarta de manzana. Me he pasado un poco al hacer la crema pastelera, aunque utilice la mitad de la cantidad indicada de leche y huevos (no tenia vainilla en casa) asi que ha habido un monton para rellenar. Y el toque final es la mermelada de melocoton, que se suponia que era solo para dar brillo, pero como venia con trozos grandes, al final ha sido una parte integrante de la tarta.
La segunda tarta ha sido un invento, no tenia ninguna receta pero me apetecia hacer algo similar. En un pueblo de las montanas, Jalon, hacen una tarta asi, pero son muy secretos y no le cuentan la receta a nadie, para tener la exclusividad. Asi que me la he inventado. La base es pasta quebrada, luego lleva calabaza y encima cholocate negro fundido. Esta es la que mas me ha gustado de las dos. He tenido que comerme un trozo antes de venir aqui a postear.
Le he dado a la vecina, y creo que mi madre ayudara bastante, asi no me sentire tan culpable por las calorias. Lo bueno es que he cambiado la receta a placer, y al inventarme la otra, he podido quitar algunos ingredientes. No he utilizado mantequilla, ni tampoco azucar (la calabaza a mi me parece suficientemente dulce tal cual) y el chocolate tiene un gran porcentaje de cacao, es de los mas sanos, lo cual hace que sean tartas bastante sanas. Luego he hecho las pepitas de calabaza con el calor restante al apagar el horno, esta vez, a la sal y al aceite de oliva le he anadido un toque de pimenton picante porque a Luke le encantan con sabores fuertes. Me Ha hecho sentir genial cocinar las tartas y me apetecia compartirlas con el mundo!